lunes

Coronel de Infantería Carlos González-Espresati de Burgos

 

Carlos González-Espresati de Burgos cumplió 100 años el 10 de febrero y, aunque se trasladó hasta Castellón con 8 años desde Huelva, localidad donde nació en 1922, es un castellonero de pro. Militar de profesión, se casó en Córdoba con Rosa María, su mujer, y tuvieron seis hijos: Carlos, Rosa María, Carmela, Francisco, Gonzalo y Cayetano.

Carlos y Rosa María, con su hijo Francisco,

Teniente General del Ejército del Aire

 Antecedentes familiares

Su padre fue Carlos González-Espresati Sánchez que nació el 21 de septiembre de 1886 en el carrer d´Amunt de Castelló. Su abuela, Paquita Sánchez de Brugada fue asistida por el doctor Clará. Su abuelo fue Carlos González-Espresati Chaparro, que había nacido en el pueblo malagueño de Gaucín, vino trasladado a Castellón como funcionario de Hacienda y aquí fue alcalde, presidente de la Cámara de Comercio y fundador de la Junta de Obras del Puerto. El matrimonio tuvo seis hijos. Además de Carlos, Gonzalo, Manolo, Paquita, Pepe y Elena, la que sería con el tiempo esposa de Vicente Traver Tomás, arquitecto y después alcalde.

El 15 de junio de 1915 Carlos González-Espresati Sánchez tomaba posesión de su primer cargo de Ingeniero del Puerto de Huelva, donde conoció a Carmela, su novia. Nueve años más tarde, se trasladó a Villagarcía de Arosa, en Galicia; para crear y dirigir su puerto. Antes, el 16 de mayo de 1921 contrajo matrimonio en Moguer, Huelva, con Carmen de Burgos Domínguez, hija de Manuel de Burgos Mazo, tres veces Ministro con Alfonso XIII. Y en Huelva nació su único hijo, Carlos, que eligió la carrera militar. Y el 11 de noviembre de 1928 tomó posesión como Ingeniero Director del Puerto de Castellón, cargo en el que se mantuvo hasta que en 1956, por razones de edad, al cumplir los setenta años, se jubiló; falleció el 1 de agosto de 1970, en la residencia de la Caja de Ahorros.

Carlos González-Espresati Sánchez

 En la primavera de 1943 se representó en el Teatro Principal de Castellón la ópera “La filla del Rei Barbut”, compuesta por Matilde Salvador, con letra de Manuel Segarra, y Carlos González-Espresati subió al escenario para leer una traducción del libreto, pues fue la condición impuesta por la censura de la época para que se pudiera representar.

Su contribución a las fiestas de la Magdalena fue decisiva: fue el autor del primer Pregó en aquel año de 1945, tan recordado; también diseñó el traje típico de mujer castellonera y lanzó al viento la palabra “Madrina”, que hoy nos acompaña ya con naturalidad. Su obra “Mitología de las gayatas”, publicada con el seudónimo de Pascual de Aurancia, es todavía la luz que inspira y que ilumina el pasado, presente y futuro de nuestras fiestas magdaleneras. Presidente de la Sociedad Castellonense de Cultura, de la Sociedad Filarmónica, del Premio Armengot y de la Escuela de Artes y Oficios, fue también el espíritu alentador de la Cofradía de La Sangre.


A la representación de la ópera “La filla del Rai Barbut”

Carlos González-Espresati y María del Carmen Villaescusa

asistieron vestidos de castelloneros, un modelo de traje

que sería adoptado en el año 1945

Datos biográficos de Carlos González-Espresati de Burgos

El 4 de noviembre de 1940, el 12 de mayo de 1941 y el 15 de septiembre de 1941 opositó con la intención de ingresar en el Cuerpo General de la Armada.

Ingresó en el Ejército el 11 de abril de 1943 y ascendió a Teniente el 15 de diciembre de 1947, siendo destinado al Regimiento de Infantería Brunete nº 62.

En la Escalilla de Oficiales de Infantería de 1949 se hallaba en la situación de disponible en la 3ª Región Militar.

Ascendió a Capitán el 25 de abril de 1952, siendo destinado a la 2ª Zona de la Instrucción Premilitar Superior, cuyas prácticas se llevaban a cabo en el Campamento de Montejaque de Ronda, Málaga.

Distintivo de la IPS


Revista del Campamento de Montejaque

Ascendió a Comandante el 26 de abril de 1963, pasando destinado, al menos hasta 1970, a la Zona de Reclutamiento y Movilización nº 32 de Castellón.

Entre 1968 y 1974, siendo Comandante, fue Asesor Militar de la Delegación Provincial de Juventudes y tenía a su cargo la realización de Cursos Preparatorios para el ingreso de los mozos en el Servicio Militar Obligatorio.

Ascendió a Teniente Coronel el 23 de junio de 1975, siendo destinado al Grupo de Fuerzas Regulares Indígenas de Infantería Alhucemas nº 5 en Melilla.

Repostero del Grupo de Regulares Alhucemas nº 5

Entre 1978 y 1981, siendo Teniente Coronel, mandó el primer Batallón del Regimiento de Infantería Tetuán nº 14.

Escudo del regimiento Tetuán nº 14

Ascendió a Coronel el 18 de noviembre de 1979 y en la Escalilla de Oficiales de 1982 se encontraba en la situación de disponible y en la de 1986 a disposición del Ministro de Defensa.

Realizó los cursos de Especialista en Automovilismo y de Jefe Especialista en Carros de Combate.


Distintivos de Automovilismo y de Carros de Combate

Entrevista en la prensa

Memoria viva de la ciudad e hijo del que fuera miembro fundador de la Junta Central de Fiestas en 1945 y autor del primer texto del Pregó, también de nombre Carlos González-Espresati, afirmó: «Recuerdo que, tras la Guerra Civil, en los años 40, hubo quien propuso quemar las gaiatas, como se hacía con las fallas, y los presidentes de los sectores y la Junta se opusieron». De hecho, la prensa publicaba en marzo de 1945 una nota de la Junta Central de Fiestas en la que confirmaba que «los monumentos no arderían a pesar de los rumores que circulaban por la ciudad». «Y es que las gaiatas nacerían de un proyecto que se iría mejorando con diferentes elementos con el tiempo», destaca.

En aquella época «se propuso hacer cada año un Pregó y mi padre fue el primero que lo escribió, con la mayor parte del texto en castellano. Manolo Vellón fue el que lo cantó desde la carroza de la reina y, al cabo de dos años, se sustituyó por el de Bernat Artola». Los recuerdos le vienen a la mente mientras conversa. En esta ocasión, hace referencia a la primera vez que se lució el traje de setí en la ciudad. Fue con motivo de la representación de la ópera de la Filla del Rei Barbut, también en la década de los 40, y se organizó una recreación donde las mujeres iban ataviadas con el traje de castellonera de gala y los hombres, de setí. «Salieron tantas parejas como partidas había en la ciudad», afirma. «Por aquel entonces, Castellón era una población pequeña, en la que nos conocíamos todos, éramos como una gran familia, con las puertas de las casas abiertas y no pasaba nada», destaca González-Espresati, quien comenta que las fiestas de la Magdalena «eran tranquilas y en la actual avenida Rey Don Jaime era donde se celebraba la feria de atracciones».

Durante toda su vida ha conocido a diversos alcaldes como Eduardo Codina, Paco Grangel, Benjamín Fabregat, Vicente Pla --conocido también como Panxeta-- o a Carlos Fabra Andrés.

La Cofradía de la Sangre es otra de las entidades de raigambre relacionadas con la familia. «En 1931 fue el último año en el que se celebraron procesiones en la ciudad y cada rama de la cofradía --caballeros, menestrales y labradores, en ese momento-- tenía una imagen que cada clavario se llevaba a su vivienda durante un año y la exhibía en la planta baja de su vivienda durante ciertos días. La Virgen del Amor Hermoso vino a mi casa porque mi padre era el clavario de la rama de caballeros y, al llegar la guerra, los republicanos quemaron la imagen», explica. «Al regresar a Castellón tras salir por la contienda bélica, mi padre encargó una nueva imagen de la Virgen a Porcar», recuerda.

Buen conversador y gran conocedor de las fiestas y tradiciones de la ciudad. Así es Carlos González-Espresati. Dialogar con él es aprender, es como hacer un máster de soca en costumbrismo castellonense. Un lujo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario