Con este lema de
cabecera, se inauguraba el uno de febrero de 2008, en la sala
de exposiciones de la fundación Dávalos-Fletcher de Castellón, la segunda
exposición de pintura de murales en papel continuo, realizados por nuestros
mayores de la residencia de la tercera edad y centro de día "El
Pinar" del Grao de Castellón.
La inauguración fue
emotiva y solemne. Doña Joaquina Pavía Masip, Presidenta de la Fundación, quien
tomó la palabra en primer lugar, manifestó su satisfacción no sólo por la
magnífica exposición en sí, sino también por el mérito y el esfuerzo de las
personas mayores que habían participado en la pintura de los murales.
Muy entrañables fueron
las palabras de doña Maria Dolores Benet, quien, en representación de los
pintores, nos dijo que cada mural lo pintaban simultáneamente varias personas,
y que la pintura era algo muy especial para ellos; que, mientras pintaban,
sentían que mejoraban su salud, su calidad de vida, su autoestima y la
sensación gratificante de sentirse, aunque mayores, insertados activamente en
la sociedad. Sus palabras fueron muy aplaudidas por el numeroso público
asistente al acto.
Don Francisco Merino
Ruiz, Presidente de nuestra Hermandad, agradecía, en primer lugar, a la
Fundación Dávalos-Fletcher su acogida y patrocinio, al garantizar con su
prestigio el éxito de la exposición. Elogió a la dirección de la residencia
"El Pinar", al numeroso equipo de voluntarios de la Hermandad que,
año tras año, colaboran en las diferentes actividades del Centro, de las que el
taller de pintura, dirigido magistralmente por Alberto Guallart, es un claro
exponente. Terminó felicitando a los "mayores artistas", los
verdaderos protagonistas de esta meritoria ·exposición.
Además de numerosos
socios, familiares y amigos, nos acompañaron, en esta inauguración, el Delegado
del Consell de la Comunidad Valenciana, don Joaquín Borrás, la concejala de
gente mayor, doña Marisa Ribes, el Subdelegado de Defensa, Coronel Pardo
Camacho y el concejal de cultura del Excelentísimo Ayuntamiento de Castellón, don
Miguel Ángel Mulet Taló, quien cerró el acto, destacando, muy emocionado, el sentir
de todos "los parlantes", que han apreciado, por una parte, la luz,
el color y el arte de los murales expuestos, y por otra, los valores humanos,
el espíritu de equipo de los autores y de los colectivos que colaboran altruistamente
con las personas mayores.
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